Evangelio de hoy, 25/01/2025

1/25/20253 min read

Lectura del santo evangelio según san Marcos 16, 15-18

En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: «Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación. El que crea y se bautice se salvará; el que se resista a creer será condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño; impondrán las manos a los enfermos, y éstos quedarán sanos».

Reflexión:

Este pasaje del Evangelio nos presenta el mandato misionero de Jesús a sus discípulos, una encomienda que trasciende el tiempo y llega hasta nosotros hoy.

"Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación."
Jesús envía a sus discípulos a llevar la Buena Nueva a todos los rincones del mundo, sin excepción. Este llamado universal nos recuerda que el mensaje de salvación es para todos, independientemente de su origen, cultura o condición. En nuestra vida cotidiana, estamos invitados a ser portadores de este mensaje, compartiendo con quienes nos rodean la esperanza y el amor que hemos recibido. En nuestro mundo, a nuestro modo.

"El que crea y se bautice se salvará; el que se resista a creer será condenado."
La fe y el bautismo son presentados como caminos hacia la salvación. Sin embargo, más que una amenaza, estas palabras nos invitan a reflexionar sobre la importancia de acoger el mensaje de Jesús con un corazón abierto. La condena no es un castigo impuesto, sino la consecuencia de cerrar nuestro corazón a la verdad y al amor que Dios nos ofrece. No es Dios quien nos condena y castiga. Somos nosotros quienes, al no seguir sus directrices para una vida buena, hacemos de nuestro mundo -y de nuestra existencia, presente y futura- un infierno en el que es difícil vivir en paz.

"A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas..."
Los signos que acompañarán a los creyentes simbolizan la transformación radical que produce la fe en nuestras vidas. Expulsar demonios representa la liberación de todo aquello que nos esclaviza; hablar lenguas nuevas indica la capacidad de comunicarnos desde el amor y la comprensión mutua. Estos signos nos animan a vivir nuestra fe de manera auténtica, permitiendo que Dios actúe a través de nosotros para transformarnos a nosotros mismos y a nuestro entorno.

"...cogerán serpientes en sus manos, y, si beben un veneno mortal, no les hará daño; impondrán las manos a los enfermos, y éstos quedarán sanos."
Estas imágenes nos hablan de la protección y fortaleza que Dios concede a quienes confían en Él. Aunque no debemos interpretarlas de manera literal, nos recuerdan que, en medio de las dificultades y peligros, de tentaciones y degradación, la presencia de Dios nos sostiene y nos capacita para llevar sanación y consuelo a los demás.

Este mandato misionero es una invitación a salir de nuestra zona de confort y ser testigos del amor de Dios en el mundo. No se trata solo de palabras, sino de acciones concretas que reflejen la presencia de Cristo en nosotros. Al igual que San Pablo, cuya conversión celebramos hoy, estamos llamados a dejar que el encuentro con Jesús transforme nuestra vida y nos impulse a compartir su mensaje con valentía y alegría.

Propósito para hoy:

Reflexiona sobre cómo puedes ser un verdadero testigo del Evangelio en tu entorno. Identifica una acción concreta que puedas realizar para compartir el amor de Dios con alguien que lo necesite.

Santoral del día:

Hoy celebramos la Conversión de San Pablo, apóstol. Su transformación de perseguidor a ferviente predicador del Evangelio nos muestra el poder de la gracia de Dios para cambiar los corazones y nos anima a confiar en la misericordia divina.

Jaculatoria para el día:

"Señor, hazme instrumento de tu paz y testigo fiel de tu amor."

Que este día sea una oportunidad para renovar nuestro compromiso misionero, llevando el mensaje de Jesús a todos los que encontremos en nuestro camino.