Evangelio de hoy, 24/11/2024

11/24/20243 min read

Evangelio según San Juan 18, 33b-37

En aquel tiempo, Pilato dijo a Jesús: «¿Eres tú el rey de los judíos?». Jesús le contestó: «¿Dices eso por tu cuenta o te lo han dicho otros de mí?». Pilato replicó: «¿Acaso soy yo judío? Tu gente y los sumos sacerdotes te han entregado a mí; ¿qué has hecho?». Jesús le contestó: «Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo, mi guardia habría luchado para que no cayera en manos de los judíos. Pero mi reino no es de aquí». Pilato le dijo: «Entonces, ¿tú eres rey?». Jesús le contestó: «Tú lo dices: soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi voz».

Reflexión

El evangelio de hoy nos coloca en uno de los momentos más impactantes del ministerio de Jesús: su interrogatorio ante Pilato. Jesús afirma con claridad que su reino no es de este mundo, y nos deja una enseñanza poderosa sobre nuestra propia vocación y misión como seguidores suyos.

Si observamos nuestro mundo, encontramos mucho por mejorar. Las injusticias, las divisiones y el egoísmo parecen estar enraizados en las dinámicas sociales y culturales que nos rodean. Esto no es casualidad; es el resultado de los valores que suelen gobernar: el poder, el éxito inmediato, la ambición desmedida. Sin embargo, aunque muchas veces nos sentimos incómodos con lo que vemos, tendemos a sumarnos a esas formas de pensar y actuar, dejándonos arrastrar por la corriente. Cristo nos ofrece una alternativa: su reino, basado en la verdad, el amor y la justicia, nos invita a transformar nuestro entorno desde una perspectiva completamente diferente.

En el mundo actual, vivir como cristiano auténtico es profundamente contracultural. Ser testigos de los valores del reino de Dios significa enfrentarnos, muchas veces, a la incomprensión, el rechazo o la indiferencia. Esto no es nuevo; ya en tiempos de Jesús, proclamar un mensaje de verdad y amor tenía consecuencias. Pero esta contraculturalidad no es motivo de desaliento, sino de esperanza. Es una oportunidad de ser revolucionarios en el mejor sentido: agentes de cambio y de renovación, iluminando el mundo con la luz de Cristo.

Cuando Pilato pregunta a Jesús: "¿Tú eres rey?", Jesús responde con una afirmación profunda: "Para esto he nacido y para esto he venido al mundo". En estas palabras, encontramos una clave para nuestra vida: nuestra esencia está vinculada a nuestra vocación. Jesús sabía perfectamente quién era y cuál era su misión, y vivió con coherencia hasta el final. Nosotros también estamos llamados a descubrir y abrazar nuestra vocación, aquello para lo que hemos nacido, y vivirlo con entrega y fidelidad.

Jesús no solo habló de la verdad, sino que fue testimonio de ella con su vida. Su forma de amar, de servir y de entregarse hasta el extremo es el testimonio más convincente para quienes lo encontraron. Así también nuestra vida está llamada a ser un testimonio viviente de la verdad. Más allá de las palabras, es nuestra forma de actuar, de amar y de relacionarnos con los demás lo que tiene el poder de inspirar y transformar.

Propósito para hoy

Reflexiona sobre tu vocación y tu papel como testigo del reino de Dios. Busca una oportunidad concreta para actuar con coherencia, siendo testimonio de la verdad y el amor de Cristo en tu entorno, especialmente en situaciones que requieran valor o contraculturalidad.

Santos del día

Hoy celebramos la solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo. Esta festividad nos recuerda que Cristo es el centro y Señor de toda la creación, y nos invita a someter nuestra vida a su reinado de amor y verdad. Una frase inspiradora para meditar hoy es: "Cristo reina no desde un trono de poder, sino desde el trono del servicio y la entrega".

Frase meditativa

"Señor, hazme testigo de tu verdad, viviendo con amor y coherencia en mi vocación."