Evangelio de hoy, 05/12/2024

Lectura del santo evangelio según san Mateo 7, 21. 24-27

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «No todo el que me dice: '¡Señor, Señor!', entrará en el Reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos. El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica, se parece a un hombre prudente, que edificó su casa sobre roca. Vino la lluvia, bajaron las crecientes, se desataron los vientos y dieron contra aquella casa; pero no se cayó, porque estaba construida sobre roca. El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica, se parece a un hombre imprudente, que edificó su casa sobre arena. Vino la lluvia, bajaron las crecientes, se desataron los vientos, dieron contra aquella casa y la arrasaron completamente».

Reflexión:

Este pasaje nos invita a reflexionar sobre la autenticidad de nuestra fe y la solidez de los cimientos sobre los cuales construimos nuestra vida espiritual. Jesús nos advierte que no basta con proclamarlo como Señor; es esencial vivir conforme a la voluntad del Padre. Esto nos lleva a cuestionarnos si nuestras acciones reflejan verdaderamente nuestras creencias y si estamos alineados con los principios del Evangelio en nuestra vida diaria.

La metáfora de las dos casas, una edificada sobre roca y otra sobre arena, nos ofrece una imagen clara de las consecuencias de nuestras decisiones. La casa sobre la roca representa una vida fundamentada en la práctica de las enseñanzas de Jesús, capaz de resistir las adversidades. Por el contrario, la casa sobre la arena simboliza una existencia superficial, sin profundidad espiritual, vulnerable a las pruebas y dificultades.

En tu entorno familiar y laboral, es fundamental evaluar sobre qué bases estás construyendo tus relaciones y proyectos. ¿Están cimentados en valores sólidos como el amor, la honestidad y la justicia? ¿O se sustentan en apariencias y conveniencias pasajeras? La solidez de tus cimientos determinará tu capacidad para enfrentar las tempestades de la vida con integridad y fortaleza.

Jesús enfatiza la importancia de la acción coherente con la fe. No se trata solo de escuchar o conocer sus palabras, sino de ponerlas en práctica. Esto implica un compromiso activo y constante con el bien, la verdad y el servicio a los demás. En tu día a día, cada decisión y acción puede ser una oportunidad para vivir el Evangelio de manera tangible.

La imagen de la tormenta que azota ambas casas nos recuerda que las dificultades son inevitables. Sin embargo, una vida arraigada en la fe y en la práctica de las enseñanzas de Jesús nos brinda la resiliencia necesaria para superar los desafíos sin desmoronarnos. Es en los momentos de prueba donde se revela la verdadera solidez de nuestros cimientos espirituales.

Además, este pasaje nos invita a la introspección y a la humildad. Reconocer nuestras debilidades y áreas donde no estamos viviendo plenamente el Evangelio es el primer paso para fortalecer nuestra relación con Dios y con los demás. La conversión es un proceso continuo que requiere apertura y disposición al cambio.

Finalmente, construir sobre la roca significa confiar en Dios como fundamento de nuestra existencia. Es permitir que su palabra guíe nuestras acciones y decisiones, sabiendo que, aunque vengan las tormentas, Él es nuestra fortaleza y refugio. Esta confianza nos da paz y seguridad en medio de las incertidumbres de la vida.

Propósito para hoy:

Reflexiona sobre las áreas de tu vida donde necesitas alinear más tus acciones con las enseñanzas de Jesús y toma una decisión concreta para fortalecer esos cimientos espirituales.

Santoral del día:

Hoy celebramos a San Sabas, abad del siglo V, conocido por su vida de oración y austeridad. Una de sus enseñanzas más destacadas es que la verdadera riqueza del monje es la pobreza voluntaria y la confianza en Dios.

Jaculatoria para el día:

"Señor, sé mi roca y fortaleza en cada momento de mi vida."